Autor: MEILIVI » dv. gen. 09, 2009 11:37 am
Julito nos mostró su verdadera cara, una cara llena de auténtica rabia contenida y rencor, ya que, según mi opinión, ya estaba pensando en qué iba a invertir el canario los 300.000€ del premio.
El Julito de siempre, el de casa, el dicharachero y divertido, con un inmenso y gran corazón, se convirtió en concursante sin ningún sentido del criterio, sobre todo cuando en la casa en directo Iván nos recordaba que hace bien poco Julito le dio un pañuelo donde el canario le escribió unas palabras como que tenía un amigo para toda la vida, para lo que quisiera, esto demuestra la falsedad del canario, el de siempre, el de casa, el que iba a por los 300.000€ y no supo perderlos.
Amigo Julito, Iván no será humilde, como comentaste ayer en tu despedida con la casa, porque en los tres meses de concurso sólo ha pedido disculpas un par de veces, pero Iván nos ha mostrado su verdadera cara, nos guste o no, pero es la única que posee, todo lo contrario a ti que has sido más falso que un billete de 3 euros.
Con Liz tres cuartos de lo mismo, ¿acaso el canario vio algún vídeo en la gala donde la concursante le pusiera a parir al canario? Es más, no le pusieron ningún vídeo de ella por falta de tiempo, debido a la trifulca montada en el plató a consecuencia de que le dijo en la despedida que parecía que no había roto un plato en su vida, pero que había roto la vajilla entera, dejando así a la concursante totalmente fastidiada en esta semana dura donde las haya, encima estando nominada.
Además, librándola de las nominaciones la semana anterior… ahí está la clave, en el trayecto del coche de Guadalix a los estudios de Telecinco, el canario pensó en el error de quedar bien delante de toda la audiencia, no salvándose a él y sí salvado a su compañera.
La Virgen de la Candelaria, a la cual no paraba de hacer alusiones y cánticos durante todo el paso del concurso y siempre mirando a la cámara, pasó a un segundo plano, y ya no era importante para él en el plató, quizás porque lo que la pidió no se lo concedió.
Pero la frase que desencadenó un auténtico revuelo en plató del canario fue: “La gente buena es la que se va y los malos los que se quedan”, con lo que el canario está llamando imbéciles a los millones de personas y telespectadores que ven, siguen con pasión este reality y se mojan votando. Es más, nos dice con este comentario sin sentido que no tenemos criterio a la hora de gastarnos los cuartos para llamar y votar, y que premiamos la maldad y desechamos la bondad. Mira Julito, no sé si te han contado de qué va la vaina, o los anteriores Grandes Hermanos, pero la gente no es tonta, y lo que no queremos dentro de la casa es una persona falsa, con una fregona pegada a la mano como tu antecesor Palomares, y diciendo día y noche, incluso en Nochevieja, tus virtudes como concursante, ¡como si no las hubiéramos detectado ya en los tres meses de concurso!
Además, poco has aportado al reality ni a la convivencia, más que mostrarnos ser un pulpo con todas las chicas, una tras otra, sin importarte ni siquiera el nombre de la chica ni su edad, tres tristes streptease y… por supuesto, el no saber perder, porque amigo Julito ayer te echaron de la casa un 51,6 % de la audiencia entre tres nominados.
